La llegada de la impresión 3D ha supuesto la mejora de muchos aspectos industriales, pero desde sus comienzos, hace más de 30 años, el ámbito médico ha sido uno de los más beneficiados, especialmente el sector que recurre a la implantación de prótesis ante la pérdida de alguna extremidad. Miles de niños en el mundo no tienen acceso a esta tecnología ni a estas prótesis que ayudarían a mejorar su calidad de vida y terminan sufriendo las consecuencias físicas y psicológicas. La idea principal idea de este proyecto es garantizarles un brazo biónico a los niños que más lo necesitan. Porque cada niño debería llevar un cartel que dijera “tratar con cuidado, contiene sueños.”
¡Únete a nosotros! Cambia la vida de un niño y el futuro de todos.